Dune (Frank Herbert)

Aunque había oído hablar hace mucho tiempo de esta novela, hasta este año no me ha entrado verdadera prisa por leerla. Me gusta la ciencia ficción, pero no acostumbro a leer muchas novelas de este género. Normalmente me atraen mucho más las películas, supongo que porque el impacto visual siempre ha sido más fuerte que la curiosidad por el libro. No fue así en este caso. O no del todo. Tenía en mente leerlo desde hacía tiempo, como iba diciendo, pero de repente vi el tráiler de la nueva película, me quedé literalmente boquiabierta y tardé cero coma un segundo en decidir que quería verla pero, esta vez sí, el libro primero. 

Soy fan de Star Wars, de toda la saga. Y también de Stargate, tanto de la película como de la serie. Incluso me confieso fan de Independence Day, que es una película en la que los americanos son tan heroicos que rozan lo ridículo (cuando la vi en el cine, durante la escena del discurso del presidente, hubo gente que se puso en pie a silbar y aplaudir, porque es tan exageradamente populista que no hay más remedio que tomársela a risa). Pero en fin, a lo que iba. Cuando estrenaron Independence Day recuerdo que alguien de mi entorno, no recuerdo quién, me preguntó si iba a pagar las 500 pesetas (más o menos) que costaba la entrada para ver "eso". Le respondí que, en realidad, las pagaría gustosamente solo para ver en pantalla grande la escena del tráiler en la que la nave espacial sale de la nube. Pues sí, ese tipo de escenas hay que verlas en pantalla grande (a ser posible). Como comprenderéis si habéis visto el tráiler de Dune (y os gusta ese tipo de películas), esa también hay que verla en pantalla grande. Pero claro, sabiendo que hay un libro previo a la película, y tan famoso, hay que leerlo primero, de modo que lo pedí por Navidad y poco después de empezar el año me puse con él.

SINOPSIS:

En el desértico planeta Arrakis, el agua es el bien más preciado y llorar a los muertos, el símbolo de máxima prodigalidad. Pero algo hace de Arrakis una pieza estratégica para los intereses del Emperador, las Grandes Casas y la Cofradía, los tres grandes poderes de la galaxia. Arrakis es el único origen conocido de la melange, preciosa especia y uno de los bienes más codiciados del universo.

Al duque Leto Atreides se le asigna el gobierno de este mundo inhóspito, habitado por los indómitos Fremen y monstruosos gusanos de arena de centenares de metros de longitud. Sin embargo, cuando la familia es traicionada, su hijo y heredero, Paul, emprenderá un viaje hacia un destino más grande del que jamás hubiese podido soñar.

Mezcla fascinante de aventura, misticismo, intrigas políticas y ecologismo, Dune se convirtió, desde el momento de su publicación, en un fenómeno de culto y en la mayor epopeya de ciencia-ficción de todos los tiempos.

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La novela cuenta la historia de Paul Atreides, un muchacho de poco más de catorce años, hijo del duque Leto Atreides y su concubina, la dama Jessica. Paul se ve obligado a abandonar su planeta natal para instalarse con su familia en Arrakis, un planeta desértico que el emperador ha entregado a su padre para que lo gobierne. Arrakis es el único lugar donde se produce la Melange, una codiciada y valiosa especia. Poco después de llegar, los Atreides son traicionados y pierden Arrakis a manos de sus enemigos, los Harkonnen. El duque es asesinado y su mujer y su hijo deben huir para salvar sus vidas. Su única posibilidad está en el desierto profundo de Arrakis, donde el calor y la falta de agua no son más que uno de los peligros, ya que también es el hábitat de los enormes gusanos de arena, y de los Fremen, un pueblo indómito y formidable. 

Paul ha recibido una educación especial desde el mismo momento de su nacimiento. Domina avanzadas técnicas de lucha y tiene un altísimo dominio de su mente y de su cuerpo ya que ha sido adiestrado por su madre, perteneciente a una especie de orden femenina llamada Bene Gesserit, que tienen poderes mentales. Paul tiene visiones que le muestran el futuro, aunque no con nitidez, pero sabe que los Fremen son su única posibilidad no solo de sobrevivir en el desierto, sino también de dominarlo y, de ese modo, controlar Arrakis, vengar la muerte de su padre y cumplir su destino. 

Hay muchos personajes, todos ellos magníficamente caracterizados y desarrollados. La evolución más fascinante es, sin duda, la de Paul, que se ve obligado a madurar y a asumir muy pronto un rol de liderazgo que le asusta porque no sabe hasta dónde lo va a llevar. Su consciencia se va expandiendo y le permite ver diferentes posibilidades de futuro, algunas de las cuales son terribles. En su esfuerzo por evitarlas teme estar dirigiéndose precisamente hacia ese futuro que tanto le preocupa. 

Las intrigas en el entorno del emperador y entre las diferentes Casas son una constante a lo largo de la historia, así como el honor, la lealtad, y la enemistad llevada al extremo del odio. Se representa una sociedad podrida, que se aferra a las comodidades sin preocuparse de cómo viven o mueren los que les sirven y les proporcionan tales comodidades. Hay personajes muy crueles y otros admirables y que enseguida se han ganado mis simpatías.

Me ha llamado especialmente la atención la forma de vivir y de pensar de los Fremen, comenzando por lo que ellos llaman "La disciplina del agua". Es tan difícil imaginar la vida en un planeta sin agua, donde aprovechar incluso la humedad de la transpiración es imprescindible para la supervivencia. La cultura Fremen es fascinante, con su religión, supersticiones y costumbres. Todo un ejemplo del poder de un pueblo con un objetivo común, que en este caso está íntimamente ligado a la ecología y al sueño de convertir Arrakis en un planeta donde el agua caiga del cielo algún día. Los Fremen son duros, como es de esperar viendo su forma de vida, y hasta violentos, aunque al mismo tiempo tienen un gran dominio de sí mismos. Quizás de entre ellos, mi personaje favorito ha sido Chani. Su particular relación con Paul es sin duda un plus en la historia. 

El ritmo varía a lo largo del libro, alternando pasajes descriptivos con otros filosóficos y también con escenas llenas de acción. No me ha resultado pesado en ningún momento, a pesar de superar las setecientas páginas. Es el tipo de historia que, si te gusta, te atrapa de tal forma que prácticamente te ves allí. Exactamente lo que me ha pasado a mí. 

En fin, que en este momento estoy devorando todas las entrevistas, making-offs y demás que me encuentro por internet, porque tengo unas ganas locas de ver la película, y su estreno se ha retrasado a octubre a causa de la pandemia. No sé qué voy a hacer con mi vida mientras tanto. Podría leer otro libro de la serie, porque sé que hay más, aunque con lo que me ha gustado este tengo un poco de miedo de que no esté a la misma altura. ¿Habéis leído alguno? ¿Qué me recomendáis?

¡Nos leemos!

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Edito a 25/09/2021

Acabo de ver la película. Como era de esperar, hay una buena parte de detalles del libro que se quedan en el tintero (aparte de que la película abarca algo así como la mitad del libro porque es solo una primera parte) pero, por lo demás, no me ha decepcionado en lo más mínimo. 

A destacar las interpretaciones de Timothée Chalamet y Rebecca Ferguson como Paul y la dama Jessica. Los efectos especiales, para mi gusto, redondos. Y la escenografía y fotografía, soberbias. Me da igual que hoy en día los efectos digitales supongan media película. Eso no quita que los paisajes sean impresionantes, las puestas de sol, maravillosas, y los planos, perfectos. Creo que es lo que necesita una película de estas características, aparte de acción, una atmósfera adecuada y un casting que dé la talla. Y para mí lo tiene todo. Ah, y la banda sonora. ¿Qué más se puede pedir? 

Yo, al menos, ya no pido más que la segunda parte. Cuanto antes.