martes, 20 de junio de 2017

El caballero negro (Clara Maio)

Esta es otra de esas novelas que tenía que haber leído hace mucho pero que, por una cosa u otra iba dejando y... 
Al final, el mes pasado en el encuentro NORA coincidí con su autora, Clara Maio, y charlamos un rato junto a nuestra común amiga Feli Ramos. Una vez más, Feli me preguntó si ya la había leído (me la recomendó hace muchísimo tiempo). Y, un tanto avergonzada, reconocí que no, pero prometí leerla.
Y, una vez más, he tenido que preguntarme por qué no la habré leído antes. 


SINOPSIS:

Romance erótico. Aventuras, amor, sexo, la diversión está asegurada. 400 páginas para disfrutar de una lectura ligera, amena y divertida.
Breena Bennett, agente del FBI, vive por y para su trabajo. Lord Strone, un auténtico caballero medieval, vive sólo para la guerra. Sus vidas se entrecruzan cuando ella viaja al pasado. Año 1013. Él la rescata de una muerte segura. Ella se convierte en su protegida y amante. ¿Será amor o lujuria lo que existe entre los dos? ¿Conseguirá ella regresar a su tiempo? ¿Se despertarán para descubrir que todo es un sueño?

* * *

La novela nos cuenta la historia de Breena, una mujer actual, fuerte y preparada, que no tiene suerte en su vida sentimental, pero en la profesional es una crack: agente del FBI, con una formación excepcional y muy bien valorada en su trabajo. Por circunstancias desconocidas se ve transportada 1000 años atrás en el tiempo, aterrizando en una época de barbarie en la que además entra con mal pie, puesto que cae enferma. 
Salvada por un misterioso caballero, será para él una carga durante una larga temporada, por culpa de la fiebre. Dow es un guerrero, frío y duro, pero que a causa de su sentido del honor se hace cargo de esa extraña y atractiva desconocida. La atracción física entre ellos los arrastra sin remedio hasta que no pueden concebir la idea de separarse, aun cuando no están seguros de cómo definir lo que los une.
Es una historia llena de acción, pasión, luchas, persecuciones, desencuentros y malentendidos, además de muchas risas y algunas sorpresas importantes.
El momento en que Breena acaba por adaptarse a la situación y saca a la mujer fuerte que lleva dentro precipita la acción en la trama. En algunos momentos sus habilidades rozan lo cinematográfico (me recordó a Misión Imposible, o a cualquiera de los superhéroes de Marvel) pero al fin y al cabo, es la heroína y tiene perfecto derecho a ser fuerte y capaz, y a salvarse a sí misma y a quien se le ponga por delante, si quiere. Me ha sorprendido gratamente.
En cuanto a Dow... es uno de esos protagonistas masculinos de los que te enamoras sin remedio, y no solo porque sea un saco de testosterona. Es íntegro, leal y generoso. Bastante terco, también, y un poco bruto, pero ¿se puede esperar otra cosa de un hombre del siglo XI? Yo creo que es, incluso, bastante civilizado.
El viaje de ambos de regreso a casa (a casa de él, porque ella en realidad no tiene a dónde ir en esa época) es toda una aventura en la que se van descubriendo el uno al otro, y en la que también descubrirán que han cambiado, que el otro los ha cambiado y ya nada volverá a ser igual.
Ha sido un agradable descubrimiento, que me ha hecho reír, soñar y hasta ponerme nerviosa según se acercaba el desenlace. ¡Me tenía en ansia viva! 
Por otro lado, señalaré que, pese a que está correctamente etiquetada como romance erótico, la cantidad y el detalle de las escenas de sexo me ha resultado un tanto excesiva para mis gustos actuales. Suelo comentar que el tema del sexo en las novelas va en gustos y en modas, y cambia según la época, así que, si bien hace dos o tres años seguramente me habría parecido perfecta, ahora sí confieso que se me ha hecho un poco repetitivo. En cualquier caso, el resto de la trama tiene ingredientes de sobra para mantener el interés. 
La única pega real que le puedo poner es que quiero una segunda parte YA. ¿Cómo nos puede dejar así?
Muy recomendable, de todos modos.

jueves, 8 de junio de 2017

La búsqueda del perdón - Garras 1 (Fabián Vázquez)

Esta era la primera vez que leía una novela de romántica LGBTI y, la verdad, no sabía hasta qué punto eso podía afectar a mi valoración de la misma. A ver, no me malinterpretéis, no tengo especial problema con las relaciones homosexuales, pero en la novela romántica y erótica cada cual tiene sus gustos y a mí es algo que no me llamaba especialmente la atención, como no me entusiasman las de temática swinger, o las de tríos (y puedo decirlo con conocimiento de causa porque he leído unas cuantas). Bueno, ahora puedo decir que también he leído LGBTI. 



SINOPSIS:
Pillado por sorpresa teniendo sexo con su amigo Gahes, Alec es expulsado por su padre, el líder de su manada. Para su sorpresa, su hermano Chayton decide irse con él junto a sus dos mejores amigos, Tomah y Lily, quienes toman la decisión de formar una nueva manada con Alec como su Alfa.

Consiguiendo finalmente comprar un pueblo abandonado llamado Silver City piensan que han logrado su hogar definitivo. Pero su sorpresa es mayúscula cuando, al llegar al pueblo, en sus lindes encuentran a cinco personas esperándoles. Un muchacho atormentado por la crueldad de su padre para con su hermano, unos gemelos tratados como parias, una chica castigada por amar a otras mujeres y una mujer en el cuerpo de un pequeño hombre. A pesar de no conocer a Alec ni a su manada, para esas personas, formar parte de esa familia será un alivio para el dolor y desprecio que han vivido. Pertenecer a una manada donde nadie los juzgará por lo que son ni por lo que desean ser.

La aparición de nuevos cambiantes removerá los corazones de algunos habitantes del pequeño pueblo. Y Alec, como Alfa, tendrá que tomar decisiones que se le volverán en contra una y otra vez.

Pero la armoniosa paz que han conseguido en Silver City no durará demasiado tiempo, ya que varios frentes se abrirán dispuestos a romperla. Un padre furioso y un mal más allá de todo límite acechan en las sombras.

¿Podrán obtener el perdón que necesitan y así lograr la ansiada paz que obtendrán derrotando a sus mayores temores?

* * * 

La verdad, que fuera de subgénero paranormal era un gran aliciente, porque es algo que me encanta, y la historia tiene suficiente acción como para que la trama romántica no monopolice la novela, si bien  las relaciones entre los personajes (que, todo hay que decirlo, dan la impresión de ser bastante enamoradizos) son algo continuamente presente. 
Me ha gustado el amplio abanico de personajes, diferentes entre sí y no solo en lo que a personalidad se refiere. Si bien la trama arranca en una manada de cambiantes lobo, se va incorporando toda una colección de razas y categorías que acaba conformando un mundo complejo y detallado, una delicia para los amantes de la fantasía y el paranormal. Aunque confieso que en ocasiones me ha costado un poco seguir el hilo de tantas explicaciones y tanto vocabulario. Menos mal que estaba todo anotado al pie de cada capítulo.
Tengo que decir que no soy demasiado fan de los cambiantes lobo (no  me preguntéis por qué, manías que tiene una, siempre he sido más de vampiros, jajaja), así que ha sido un importante punto a favor que hubiera también magos y vampiros, además de algún otro ser más que interesante. Esa variedad ha conseguido mantener mi curiosidad intacta durante toda la historia. También me ganó desde el principio la riqueza de los personajes, algunos de los cuales son realmente entrañables. Sus sentimientos traspasan el papel y en muchas ocasiones te dejan mirar directamente en sus corazones. Por otra parte, tiene también un peculiar sentido del humor que me ha sacado más de una sonrisa e incluso alguna carcajada. 
Tal vez lo que menos me ha convencido es que tenga tantas escenas eróticas, porque, si bien algunas me parecían fundamentales para el desarrollo de la historia, otras no me lo parecían tanto. Tampoco me entusiasman las escenas demasiado violentas y hay un par un poco bestias para mi gusto, aunque claro, para gustos hay colores... El estilo en general es sencillo, sin florituras (que personalmente no me entusiasman porque es fácil excederse con ellas y echar a perder el texto), y la corrección es aceptable.

En resumen, una experiencia interesante y una historia entretenida y llena de acción e imaginación. ¿Os atrevéis con ella?

sábado, 3 de junio de 2017

I Evento NORA

El pasado fin de semana se celebró en Santander el I Evento NORA. Muchos éramos los autores y lectores que llevábamos meses esperando esa fecha con ilusión y muchas ganas. Al menos yo, volví más que satisfecha.


Tuve la suerte de poder planificarlo con antelación y pedir fiesta en el trabajo el viernes, con lo que pude disfrutar con mucha más tranquilidad de eso que, en el fondo, es lo que más valor tiene en un encuentro de estas características: la gente. Autoras, lectoras, blogueras... Amigas, en definitiva. Bueno, y amigos, que alguno también había, jajaja.
Apenas pasaba del mediodía cuando ya estaba yo llegando a Santander, wasapeando con el resto de autoras con quienes iba a disfrutar el fin de semana. La estación de autobuses estaba muy cerquita de nuestro hotel, así que llegamos enseguida. En un abrir y cerrar de ojos estábamos comiendo en una de las terrazas cercanas, inmersas en nuestras charlas y tan a gusto como si nos conociéramos de toda la vida, aunque de hecho, algunas éramos hasta entonces completas desconocidas.
Tras un par de terrazas más (con sus correspondientes charlas y también un par de chaparrones que nos obligaron a resguardarnos bajo los toldos) nos dirigimos al Ayuntamiento para el primer acto oficial del Evento.
Y creo que este es buen momento para poner aquí el programa y que os hagáis una idea de cuántas cosas geniales nos esperaban aún. 


La recepción en el Ayuntamiento de Santander fue sencillamente espectacular. Creo que la mayoría nos sentíamos un tanto cohibidos al entrar en un edificio tan bonito y con un aire tan solemne, pero tardamos poco en sentirnos como en casa. La alcaldesa en persona nos dio la bienvenida a su ciudad, junto con las cuatro organizadoras: Yolanda, Patricia, Marta y Maiki. 


Todos los asistentes fuimos agasajados con vino español y canapés (todo delicioso, por cierto). Y el acto fue perfecto para romper el hielo y dar pie a numerosos corrillos de charlas entre los que la gente se iba moviendo con soltura, saludando a unos y a otros. 


Al finalizar el acto, nos despedimos con más ilusión si cabe, puesto que, tras semejante apertura, las ganas de reencontrarnos al día siguiente para el encuentro propiamente dicho eran aún mayores. 


El sábado amaneció nublado, pero a la hora convenida éramos muchos los que nos congregábamos en las caballerizas del Palacio de la Magdalena, donde iba a tener lugar el Evento. Un marco incomparable y perfecto para un acto de estas características. Os dejo la lista de autores asistentes. 


La sala no era muy grande, aunque la distribución era suficientemente confortable. Lo que sí habríamos agradecido es que el estrado hubiera tenido un poco más de altura, ya que desde la zona de atrás, si bien se oía perfectamente, apenas se veían las caras de los ponentes. 

Tras las acreditaciones, Yolanda Revuelta, como madrina, pronunció un breve discurso lleno de ilusión y agradecimiento. Y comenzaron las mesas. 

MESA 1: Autoras autopublicadas
TEMA: Otra visión de la romántica
Moderadora: Natalia Martínez (traductora)
Con: Sophie Saint Rose, Emma Gigan, Antiliados, Helen F.Wings y Nuria Parente Nogueras


He de decir que me desconcertó un poco esta primera mesa. En primer lugar, porque arrancó con una presentación de la última novela de cada autora, cuando yo habría jurado que leí por alguna parte que la intención no era hacer mesas de presentaciones sino de debate, y al final la presentación se comió más de la mitad del tiempo, y lo mismo ocurrió en la mayoría de las mesas que vinieron después.

Aparte de eso, los títulos de las mesas no dejaban muy claro por dónde iba a ir el tema, y aún hoy, no sé muy bien a qué se refería lo de "la otra visión de la romántica" ya que el debate se centró principalmente en si es conveniente, lícito o como queráis llamarlo,  sorprender al lector con un final que, aun siendo adecuado, no sea el típico "vivieron felices y comieron perdices". La cosa se calentó, y no es para menos, puesto que, como bien hizo constar gran parte del público, esto NO ES NEGOCIABLE. En la definición de novela romántica entra el final feliz con perdices incluidas. Si acaba como el rosario de la aurora, no es romántica, es otra cosa (que se llama novela sentimental, y no es ni mejor, ni peor, pero es otra cosa, y a mí particularmente, no me gusta). Y aquí es cuando me acuerdo de cuánta gente considera romántico "Romeo y Julieta" cuando es un dramón como una catedral en el que muere hasta el apuntador. 

Personalmente pienso que hoy en día hay un par de tópicos erróneos y muy extendidos en el mundo de la romántica. Uno de ellos es ese "sorprender al lector". En mi opinión, eso no es necesariamente bueno si se hace en un momento y de una forma inadecuada. Muchas novelas románticas empiezan con "chico conoce a chica" y ya sabemos cómo van a terminar, pero no nos importa, porque lo importante no es cómo acaba, sino cómo llega a ese final que ya sabemos más o menos cuál va a ser. Los giros y los personajes tienen que sorprendernos, el final no. Si en una novela que se anuncia como romántica uno de los protagonistas muere, a mí no me dan una sorpresa, me dan un disgusto de órdago y me fastidian la novela, así de claro.
Y aunque no se mencionara en esta mesa, el otro tópico (más bien una frase sobada a más no poder) es el "no te dejará indiferente". A mí me hace descartar la novela casi de inmediato, por aburrida y por ambigua, porque por si no lo habéis pensado bien, que algo no te deje indiferente no es necesariamente bueno. Te puede horrorizar, que aún es peor.

Entre mesa y mesa hubo descansitos de quince minutos que se agradecieron una barbaridad porque nos permitían estirar las piernas, comentar con las más cercanas nuestras impresiones, y seguir saludando a las que íbamos descubriendo a lo largo del día. Un gran acierto de la organización.


MESA 2: Autoras editorial
TEMA: Del rosa chicle al rojo pasión
Moderadora: Eugenia Dorado (lectora)
Con: Alissa Brontë, Merche Diolch, Ana F. Malory, Elena Garquin y Nuria Llop


La mesa comenzó, al igual que la primera, con una presentación de novelas que también consumió buena parte del tiempo. El tema aquí parecía más claro: si ha habido un cambio en cuanto a la carga sexual en la romántica a lo largo de la historia reciente. La opinión generalizada era que, digan lo que digan, el sexo vende, y en la mayoría de las historias hay que incluir sexo hoy en día, si bien en función de la novela y del gusto de la autora, unas son más explícitas y otras más sutiles y se dedican más a insinuar que a mostrar, como suele decirse. 
Personalmente pienso también que depende de la historia, y además es importante que la autora se sienta cómoda con lo que escribe, por lo que es quien debe decidir cuánto y cómo. Aunque en cierto modo creo también que el boom de la erótica está remitiendo y la gente empieza a buscar opciones diferentes.

MESA 3: Lectoras y blogueras
TEMA: La necesidad de una reseña constructiva
Moderadora: Reina Negra (Blog: La criticona de la red)
Con: Marta Fernández del blog Tejiendo críticas en la sombra, Vicky del blog Mi refugio de sueños y Vanesa (Azahara Vega/Sheyla Drymon) de Pasión por la novela romántica


Esta mesa dio bastante de sí. El debate se centró no solo en la necesidad de una reseña constructiva, sino también en el hecho de que hay blogs que se esfuerzan en cumplir lo mejor posible con su labor, y otros que solo buscan tener más y más seguidores (con el objetivo de obtener colaboración con autores y editoriales y con ella, lectura gratis). Incluso se habló de blogs que piden dinero a cambio de reseñar. ¡Pues hasta ahí podíamos llegar! Además, si ya se pone en entredicho a veces la honestidad en una reseña por el hecho de que al blog se le haya regalado el libro...

Alguna de las blogueras aconsejó a las editoriales y a las autoras que antes de enviar una novela a un blog, lo estudien primero, no solo para ver la calidad de las reseñas y el alcance que tiene, sino también para saber si leen la temática que escribes. Me parece razonable, sobre todo la primera parte. En cuanto a  la segunda, salvo que el blog sea claramente de novela de terror y tú pretendas mandarle una romántica, tampoco me parece tan terrible. Es tan fácil como "esta es mi novela, de temática romántica paranormal (por poner un ejemplo), puedes ver aquí la sinopsis, si te interesa me gustaría que la leyeras y la reseñaras" ¿no? Vamos, que al blog no le cuesta tanto echar un vistazo y comprobar si la novela es de su estilo o no...

Las blogueras también se quejaron de que, al igual que a las autoras les gusta que les dejen comentarios y valoraciones, a ellas también les gusta que se comenten sus reseñas, cosa que pocas veces sucede. Doy fe. Si soléis pasar por aquí, veréis que comento todos los libros que leo, y aunque muchas autoras me agradecen en facebook que las haya leído y valorado, pocas son las que dejan comentario en el blog. Lamentablemente creo que es una práctica en desuso.

Se habló también de la nueva tendencia de los vlogs (por YouTube) y de las reseñas que, aun siendo constructivas, las autoras o editoriales no las aceptan porque se exponen los puntos que no gustaron a la lectora, llegando incluso a amenazar al blog si la publica. La verdad, me parece lamentable y vergonzoso. Una opinión siempre es bienvenida si es sincera, correcta y bien argumentada, porque puede ayudar a mejorar, o quizás simplemente a saber por qué a esa persona no le gustó, que no tiene que ser porque algo esté mal, sino que tal vez no era de su gusto y ya está. 

Aquí recuerdo que Azahara Vega pidió que se publicara más romántica paranormal, aunque se dice que este género no vende. Le tengo que dar la razón, y seguramente sea porque la gente sigue sin atreverse a descubrir que paranormal es mucho más que "esas novelas de vampiros". El paranormal, en palabras de la propia Azahara Vega es: magia, viajes en el tiempo, brujas, meigas, druidas, ángeles, demonios, cambiantes, hombres lobo, banshees, fantasmas, elfos, personas con poderes mentales, humanos modificados genéticamente, cyborgs etc. Se olvidó de mencionar las hadas, y yo aprovecho para animaros a darle una oportunidad porque igual os sorprende. Podríais empezar con mi novela Magia Elemental que acaba de salir hace menos de dos semanas. Yo lo dejo ahí... jajaja.  

Hubo un pequeño revuelo con el tema de los epílogos, porque casi todas las blogueras coincidían en que los querían, y que una novela sin epílogo no les gusta. Tengo que disentir, y la mayoría de las compañeras que me rodeaban estaban de acuerdo conmigo. Una novela agradece un epílogo, especialmente cuando cierra la historia mostrando cómo ha acabado todo unas semanas, meses o años después, pero no siempre es necesario. De hecho, en las sagas o series, por ejemplo, no hay necesidad ni tiene sentido, puesto que el siguiente libro puede retomar la historia exactamente en el punto en que acabó la anterior, ¿no creéis?

En resumen, que es necesario que las críticas sean constructivas, en los blogs, en Facebook, en Twitter, otras redes sociales, en los comentarios de Amazon en Goodreads, etc. Y que realmente no os hacéis una idea de cuánto las agradecemos los autores. 

MESA 4: Pink Love Ediciones
Esta no fue realmente una mesa de debate, sino una presentación de este nuevo proyecto.

Y llegó la hora de la comida, que nos sirvió también para dar un largo paseo y disfrutar del entorno. Hasta nos dio tiempo de tomar tranquilamente café. Como ya he dicho antes, fue un acierto disponer de ese tiempo, así como de las pausas entre mesa y mesa, pues a mi parecer el trato directo con la gente es una de las cosas más valiosas que te llevas de este tipo de encuentros, y en otras ocasiones los autores hemos demandado más de estos ratos, porque si no, al final, para poder charlar a gusto, no te queda más remedio que saltarte alguna mesa. ¡Por fin nos han hecho caso! De modo que, mi más sincero agradecimiento a la organización. 



MESA 5: Autores autopublicados y editorial
TEMA: La romántica desde el punto de vista masculino
Moderador: Javier Granda (Editorial Popum Books)
Con: Olivier Moon (Alvaro Ganuza), Javier Romero, Pablo González y Javier LoboMesa 4: La romántica desde el punto de vista masculino
Olivier Moon, Javier Romero, Pablo González, Javier Lobo


Creo que esta mesa fue mi favorita del día, sinceramente. El moderador, Javier Granda, hizo un fantástico trabajo, con un enfoque un tanto diferente, al instar a los propios autores a hablar brevemente de sus novelas en lugar de leer las sinopsis y hacerles preguntas. Eso, además de ser más ameno, dejó más tiempo para el debate que era lo que realmente interesaba. Cada autor tenía trayectorias y experiencias diferentes, puesto que unos eran prácticamente recién llegados, y otros ya tenían un buen número de novelas a sus espaldas, y fue una mesa muy esclarecedora. Alguno se atrevió abiertamente a denunciar las malas prácticas que llevan a cabo supuestas editoriales, que ensucian el nombre de la romántica y desaniman a quien con tanta ilusión trabaja para hacerse un nombre y un futuro. Se habló de la diferencia (o no) de sensibilidades. De si puede confundirse o no la manera de escribir de un hombre y la de una mujer, de las dificultades a las que un autor se enfrenta por el hecho de ser un hombre en un mundo mayoritariamente femenino. De los prejuicios. En fin, que fue una mesa muy entretenida y nos dejó a todos los asistentes un estupendo sabor de boca. 

MESA 6: Autoras autopublicadas
TEMA: ¿Escribir es exponerse?
Moderadora: Vanesa Gómez (lectora)
Con: Mary Ann Geeby, Mar Fernández, Rose B.Loren, Feli Ramos, Elena H.D.Cruz


En esta mesa se volvió a la dinámica de presentación de novelas, si bien tuvimos la sorpesa de que Feli Ramos mostrara en exclusiva para el NORA la portada de su próxima novela (Kaori), que es una preciosidad, todo hay que decirlo. Habló un poco de su viaje a Corea del Sur y de lo bien que le ha venido para completar su documentación, puesto que ha aprovechado para reescribir algunas partes ya que se ha encontrado cosas que eran muy diferentes a como las esperaba, y sensaciones en las que no se había parado a pensar y que ha podido plasmar mucho mejor al descubrir el escenario de primera mano. 
Hablaron de las críticas, ya sea en la familia, en el trabajo, en las redes sociales, o por parte de las lectoras, pues aún hay mucha gente que pregunta (como dice un amigo mío, "la ignorancia es atrevida") si la novela es autobiográfica o si tú haces lo mismo que escribes. Sí, claro, y Stephen King es un psicópata peligroso, si lo vemos así, ¿no?  Comentaron también la sobreexposición en las redes sociales, que hay gente que parece que no sabe hacer uso de ellas y en lugar de usarlas para dar una imagen profesional, lo que da es la imagen de patio de colegio, o peor aún, de vecinas cotillas que no hacen más que despotricar unas de otras. 

MESA 6: Autoras editorial
TEMA: Todo empezó aquel día
Moderadora: Susana Granados (Lectora)
Con: Olivia Ardey, Raquel García Estruch, Elena Bargues, y Anna Casanovas


Nuevamente la mesa comenzó con presentaciones y, después, cada autora explicó un poco cómo ve la romántica actualmente, y cómo ha cambiado a lo largo de estos años. 
Olivia Ardey comentó que aún le queda mucho a este género por mostrar, y que hay mercado para todo lo que se publica. Aquí hubo un poco de debate por aquello de que a veces parece que haya más autoras que lectoras, y las novedades apenas se vean en el mar de libros que sale al mercado cada semana. 

Elena Bargues defendió que se publicara más acerca de la historia de España, ya que a su entender tenemos mucho que ofrecer de nuestra historia, y animaba a las autoras de histórica a dejar un poco a los highlanders y buscar en la historia de España el lugar ideal para sus novelas.
Me parece una buena idea animar a que, quien quiera, escriba sobre la historia española. Hay cada vez más autoras españolas que escriben sobre bandoleros, porque les gusta y lo conocen, o sobre las colonias, pero creo que es algo que no se puede forzar. Soy partidaria de que cada cual escriba aquello con lo que se siente cómodo, y me gustan por igual los bandoleros, los celtas, los highlanders, los vikingos, los normandos o cualquier otra cultura o momento histórico. He leído varios libros ambientados en diferentes épocas de la historia de España, y admiro que los autores se interesen por ella y la usen como base para sus novelas, pero al igual que todos los géneros no son necesariamente para todos los lectores, tampoco lo son para todos los autores. Personalmente no he sentido (hasta hoy, que todo puede ser) la necesidad de escribir histórica, pero si la sintiera, escribiría sobre aquel lugar y época que mi historia me pidiera, tanto si es la nuestra propia como si no. Al fin y al cabo, todos somos ciudadanos del mundo, y como se trata de vivir un tiempo que tampoco es el nuestro ¿qué más da cuál sea el tiempo y el lugar? 
 Lo que quedó claro es que realizan un arduo trabajo de documentación en cada una de sus novelas, invirtiendo una gran cantidad de tiempo y esfuerzo. Eso es, a mi entender, uno de los aspectos que da a la novela histórica el estatus que tiene dentro de la romántica. 

Tras esta mesa hubo un sorteo final, que fue muy divertido y en el que a casi todo el mundo le tocó algo. A mí me tocó un libro, El jardín de las mentiras, de Amanda Quick, que además venía en un precioso envoltorio en forma de bolso en el que rezaba "cita a ciegas con un libro". Me enamoré del detalle, y espero tener pronto mi cita con él. 


Y este es el montón de regalitos que me traje en mi bolsa del evento. Faltan un par de marcapáginas que mis peques se agenciaron de inmediato. 


Y tras el sorteo, se acabó lo que se daba. Salimos con una sensación muy positiva, puesto que, si bien hay cosas que obviamente podrían haberse mejorado, se ha notado mucho el cariño y el cuidado con que se ha preparado este primer evento NORA, y no puedo menos que felicitar a la organización por lo bien que nos han hecho sentir a todos los asistentes.  No sé cómo andaré de fechas el año que viene, pero si puedo asistir, me encantará repetir la experiencia. 

Acabamos el día pasadas por agua, ya que se desató una tormenta con granizo y todo (es lo que tiene al norte, menos mal que, al menos a mí, que no me pilla por sorpresa, se me había ocurrido meter un paraguas en el bolso). El domingo de regreso a casa estaba agotada, por la falta de sueño y el bajón después de tantas emociones, pero también estaba feliz por los reencuentros, por la gente a la que quería conocer en persona y con la que he podido charlar y hasta tomarme un café. Por todas esas risas, charlas y recuerdos que hacen de estas ocasiones algo tan especial, que nos enriquece y nos une, y nos recuerda que todos y todas tenemos una pasión en común: la novela romántica.