Recuerdo que intenté leer este libro justo después de haberme bebido en cuatro tardes La historia interminable, que me fascinó y se convirtió en mi novela favorita cuando tenía trece o catorce años. Creo que con Momo, sin embargo, no pasé del primer capítulo. Quizás el listón estaba demasiado alto y las expectativas me jugaron una mala pasada. El caso es que lo dejé en la estantería y allí se quedó hasta que, hace unos meses, alguien me dijo que debería leerlo. En los últimos años he releído algunos grandes clásicos que en su día leí por obligación (y que sufrí más que disfruté) y mi percepción al leerlos ahora ha sido diferente, así que supongo que eso me decidió a darle otra oportunidad. Fui a casa de mis padres, lo recuperé de la estantería, y me lo traje a mi casa. Y en dos tardes de piscina me lo he ventilado. Ha sido una muy buena idea incluirlo en la lista de libros que quería leer este verano.
SINOPSIS:
Momo es una pequeña niña que vive en las ruinas de un anfiteatro de una gran ciudad italiana. Es feliz, buena, cariñosa, con muchos amigos, y tiene una gran virtud: la de saber escuchar. Por eso, es una persona a la que mucha gente acude para desahogarse y contar las penas, ya que ella es capaz de encontrar una solución para todos los problemas. Sin embargo, una amenaza se abalanza sobre la tranquilidad de la ciudad y pretende destruir la paz de sus habitantes. Llegan los Hombres Grises, unos extraños seres que viven parasitando del tiempo de los hombres, y convencen a la ciudad para que les entregue su tiempo.
Publicada en 1973 y subtitulada Los caballeros de gris o Los hombres de gris, trata sobre el concepto del tiempo y cómo es usado por los humanos de sociedades modernas. También trata de la estafa, porque los hombres de gris quieren estafar a los humanos porque ellos viven de su tiempo. Así que los hombres de gris estafan a los humanos con cifras de tiempo.