El Mesías: El niño judío (Anne Rice)

 Hace ya un tiempo me encontré este libro en la cabecera de ofertas del supermercado, y me llamó la atención por el nombre de su autora. ¿Quién no la conoce por sus novelas de vampiros? Yo la descubrí con La momia y me encantó, aunque también me sorprendió (en este caso no tan bien) con la trilogía de la Bella Durmiente, que dejé a medias porque no era lo mío. En fin, el caso es que le eché un vistazo a la sinopsis y me lo llevé para casa. 

SINOPSIS:

Anne Rice abandona momentáneamente las historias de vampiros para adentrarse en una versión sui géneris pero rigurosamente documentada de la biografía de Jesucristo. El hijo de Dios nos cuenta en primera persona los recuerdos de su estancia en Alejandría y su traslado, poco tiempo después, a Nazaret junto con su familia. El Mesías es la primera parte de una trilogía sobre la vida de Cristo, el niño judío, atrevida y sin duda polémica.

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La autora recrea la infancia de Jesús desde su punto de vista como un niño judío de ocho años que regresa de Egipto con su familia a Nazaret, sin conocer los detalles de su nacimiento, que sus mayores le ocultan para protegerlo. Pero Jesús es un niño especial y empieza a darse cuenta de ello y a asustarse porque no lo comprende.


Me ha parecido un acercamiento fascinante a la cultura judía de la época, y una narración muy acertada en el sentido de que está relatada como lo haría un niño pequeño pero al mismo tiempo curioso, relativamente culto y muy sensible. Un niño especial que aún no sabe que lo es.


Abarca aproximadamente un año de la vida de Jesús, desde el regreso de Egipto hasta el momento en que se pierde en el templo de Jerusalén para empezar a encontrarse a sí mismo. Puesto que los judíos vivían en unidades familiares compuestas por varias generaciones de la misma familia y que englobaban varios hermanos con sus parejas y descendientes, hay bastantes personajes.


Los que más me han gustado han sido el pequeño Jesús, con la inocencia y las contradicciones propias de su edad; su madre, María, que es aún muy joven y hay muchas cosas de las que no entiende, pero al mismo tiempo tiene un gran corazón, unas convicciones férreas, y adora a su hijo. También José, que es un hombre tosco en cierto modo, que tampoco acaba de entender la vida que le ha tocado en suerte, pero que protege a los suyos con todas las herramientas a su alcance.


El trabajo de documentación es exhaustivo, aunque en las notas finales la autora explica que tuvo una formación católica muy estricta, de la que acabó huyendo para casarse con un ateo, para volver muchos años después a la fe en una comunidad mucho más abierta. Se nota que sabe de lo que habla, y no me refiero a creencias, sino a tradiciones y forma de vida de la época. En cuanto al aspecto religioso, creo que está muy bien enfocado, y puede ser visto perfectamente como una novela histórica con toques de fantasía o ciencia ficción, sin intención alguna de adoctrinamiento.

Me ha dejado una sensación muy buena, y lo he disfrutado un montón. Me ha parecido una historia muy bonita y bien contada, llena de detalles y sentimientos (y muchas referencias bíblicas e históricas, eso sí, así que, si eso te frena, no digas que no te avisé 😉).